Sin un control adecuado, esta enfermedad puede volverse grave y causar daños irreversibles
La causa principal de hígado graso en el mundo es el alcohol. El hígado graso no alcohólico es cuando se acumula grasa en las células del hígado por problemas metabólicos.
Personas con factores de riesgo como obesidad y diabetes tipo 2 son especialmente vulnerables a esta enfermedad. La afección también se encuentra estrechamente relacionada al síndrome metabólico, un grupo de anomalías que incluyen el aumento de la grasa abdominal, escasa capacidad para consumir insulina, presión arterial alta y niveles altos de triglicéridos (un tipo de grasa de la sangre).
El hígado graso no alcohólico normalmente no presenta síntomas, pero cuando lo hace puede incluir:
- Agrandamiento del hígado
- Fatiga
- Dolor en la zona derecha del abdomen
La Esteatohepatitis es una forma potencialmente grave de la enfermedad, se caracteriza por la inflamación del hígado que puede avanzar hacia la cicatrización y el daño irreversible. Este daño es similar al causado por el consumo excesivo de alcohol. En su forma más grave puede avanzar hacia la cirrosis y la insuficiencia hepática.
Posibles signos y síntomas de cirrosis son:
- Crecimiento abdominal por líquido (ascitis)
- Vasos sanguíneos dilatados justo debajo de la superficie de la piel
- Crecimiento mamario en los hombres
- Bazo aumentado de tamaño
- Palmas rojas
- Color amarillento en la piel y en los ojos (ictericia)
Consulte a su médico si presenta alguno de estos síntomas.
